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El peligro de la insensatez
En
este tiempo actual, entre otros, existe un mal evidente y sustancial que es:
·
“La colosal y destructiva insensatez en que vivimos”.
En
vez de intentar, entre todos:
·
Resolver los importantes, acuciantes y a veces graves problemas de
España.
Nos
dedicamos, por ejemplo, entre otras
cosas peligrosas, a remover el pasado; pero no de una manera positiva buscando
nuestras raíces: lo que nos une; sino de una manera negativa que consiste en
buscar cuestiones que conllevan el indagar o recalcar lo que nos separa y lo
que nos divide.
Es
demasiado frecuente ya ver que en determinados sectores políticos se organizan con
el presupuesto de todos, actividades:
·
Violentas o insultantes o para hacer daño, creando así un ambiente adverso
y enrarecido.
Hoy
muchos ciudadanos actúan con fines torcidos y con afán desmedido de crear
discordia:
·
Hoy día en España se ataca demasiado a los demás.
·
Hoy peligrosamente abundan las divisiones y las tensiones desmedidas.
Y
mientras lógicamente:
·
España va mal a nivel: político, social y económico, pero esto curiosamente
parece preocupar menos.
Parece
preocupar más, insisto, esa tendencia ya viciada y delictiva de atentar a los
derechos de los demás, de criticar, de crear ese ambiente corrompido y tóxico
que puede llegar a convertirse en un veneno mortal.
En
España peligra la paz, hay una violencia, enmascarada o visible, que puede en
cualquier momento explotar y ocasionar el deterioro de la convivencia y sus peligrosas
consecuencias.
Hay
muchos sectores en los que se palpa lamentablemente: el odio y la acción
vengativa y ruin.
Convendría
fomentar por todos los medios:
·
La cordura, los buenos hábitos de conducta, el respeto, la cordialidad,
la amabilidad, la tolerancia.
·
La decencia: política, social y profesional.
·
Actividades de convivencia sana.
Convendría
abandonar de raíz:
·
Lo que nos separa.
·
La teoría tan nefasta del: “Todo vale”
·
La idea de no poner límites: a nada, ni a nadie.
·
Tanto el libertinaje como la dictadura.
·
La corrupción que, ¡ojo!, siempre acaba destruyendo.
Y
coger la imprescindible bandera de la paz. Esa paz que, por ser el gran y
prioritario tesoro, tenemos que custodiarla y fomentarla
Publicada
en DIARIO DE AVILA Digital 22 febrero 2016
Publicada en “Cartas al Director,
Tu voz en la red” Digital 24 febrero de
2016
Publicada en El Periódico.
Digital 24 febrero de
2016