326 Educación
coherente y emocionalmente inteligente
Javier Urra al ser el primer Defensor del
Menor de la Comunidad de Madrid y ser autor de una amplia gama de libros sobre
educación, es un auténtico experto.
Todos queremos afrontar positivamente los
retos para educar mejor, dado que los retos en este asunto son difíciles y a la
vez prioritarios.
Por eso creo que os interesarán estos
puntos importantísimos que nos ofrece Javier Urra para educar con criterio
y amor a nuestros hijos.
Vamos a ver claves de máximo interés
para padres y madres que quieran educar a personas:
·
“Inteligentes, honestas, sensibles, leales,
amables, cordiales, responsables, comprometidas, optimistas y vitalistas”.
También quisiera decir:
·
“En
este trabajo, personalmente -como Educador y como Padre- he añadido comentarios
a esos puntos de Urra para reforzarlos o completarlos o para reflejar mi
opinión”.
·
“Además
he añadido alguna nueva idea distinta, alguna pauta con la idea de enriquecer
el artículo y el objetivo del mismo que es la educación”.
¿Y que buscamos con todo esto?
·
Educar
de manera coherente.
·
Educar
emocionalmente e inteligentemente.
·
Educar
con sentido común.
·
Educar
para hacer de los niños y niñas unos jóvenes y adultos humanamente,
espiritualmente y socialmente adecuados
·
Educar
para que sean individual y colectivamente felices.
Algunos
puntos para conseguirlo:
·
Desear
ser padres, tener vocación. Esto es muy importante tener y vivir con ilusión e
intensidad la vocación.
·
Querer
a los hijos y transmitírselo. Pero haciéndole asumir, eso sí, la responsabilidad
de que tienen que llegar a ser adultos. Querer a los hijos como nuestro gran
tesoro, hacerles ver que son lo más importante para nosotros; esa ha de ser
nuestra gran meta
·
Ser
coherentes, constantes, tener criterio, dar buen ejemplo. Explicar las cosas
razonándoles.
·
Educar
en el amor, en la libertad, en la responsabilidad y en la autonomía marcando
normas y límites.
·
Entender
que socializar es enseñar a ponerse en el lugar del otro, a cooperar, a
compartir. Enseñarles la importancia de la amistad.
·
Hacer
que se asuma la frustración, asumir la culpabilidad ante los
hechos mal realizados. Ser consecuentes de nuestras obras siempre y ante ellos
también
·
Saber
aceptar el perdón y perdonar. Esto es de gran importancia en el proceso
educativo y humano; y para vivir la solidaridad y el amor.
·
Transmitir
sensibilidad y compasión. Ser sensibles ante los problemas de los demás es de
una gran trascendencia y les ayudara siempre.
·
Tener
una relación abierta, transparente con los hijos, con sus abuelos, con otros
miembros familiares.
·
Tender
puentes con los tutores y profesores para que el proceso de
aprendizaje fluya positivamente.
·
Emplear
el sentido del humor, relativizar los problemas, buscar conjuntamente
soluciones, utilizar un pensamiento alternativo.
·
Gustar
de aprender, de conocer, de viajar. La inteligencia es también vivencia,
experiencia y contacto.
·
Mostrar
a nuestros amigos y conocer a los suyos. Así conoceremos cuál es su vida y
podremos ayudarles mejor.
·
Practicar
deporte, estar en contacto con la naturaleza. Quiere decir disfrutar en
plenitud de la vida y de los dones recibidos.
·
Conocer los
barrios donde golpea la pobreza, los hospitales donde los niños y menos niños
sufren. O sea enseñarles el sentido cristiano del sufrimiento y la cruda
realidad tal como es.
·
Analizar
la realidad, no solo los sucesos. Profundizar en los temas, no quedarnos
siempre en superficialidades o ambigüedades.
·
Darle
a la vida una razón de ser, un sentido, una transcendencia. Hablar de Dios, dar
criterios y orientaciones; pero dejándolos siempre en libertad, según la edad.
·
Esforzarse
cada día por ser mejores personas. Ayudarles a serlo con la vida, con el día a
día, con los ejemplos, educando.
·
Explicar
nuestras limitaciones unido a nuestro deseo de hacerlo lo mejor
posible, nuestra confianza en que ellos educarán a sus hijos con el mismo
cariño que nosotros lo hacemos con ellos.
Estas
pinceladas nos pueden ayudar a hacer de nuestra labor educativa un arte, un
arte diseñado para amar y para hacer de nuestros hijos un ejemplo de personas
integras, con virtudes y con valores y todo esto en un mundo difícil pero
apasionante. El reto está en nuestras manos.
Publicada
en “Cartas al Director, Tu voz en la red” Digital 12 agosto de 2015
Publicada
en DIARIO DE AVILA Digital 13 agosto de 2015