410 Un “lío” entusiasta con Francisco.
Con motivo del nuevo viaje del papa a América quisiera
en este artículo comentar algunas de las frases del papa Francisco dirigidas a
los jóvenes en su anterior viaje apostólico a Latinoamérica en 2015. Algunas de
estas frases de Francisco las he recogido de la web Opus Dei.
Durante su viaje el Papa Francisco se dirigió con
especial entusiasmo a los jóvenes a los que trato siempre con cariño, con
amabilidad y ternura.
Fueron muchas las frases, llenas de profunda cordialidad,
que el papa Francisco nos regaló y les regaló, especialmente a ellos, en esta
visita.
Empezamos con esta frase:
·
“La juventud es tiempo de grandes ideales. A mí me viene decir muchas veces
que me da tristeza ver un joven jubilado”.
Los ideales tienen una gran importancia en la vida de
los jóvenes; y en la actualidad por desgracia es una realidad que ésta frecuentemente
ausente, y es por ello por lo que en muchos casos los jóvenes andan a la deriva,
sin un puerto y una meta a la que dirigirse. Los jóvenes, tristemente y con
mucha facilidad, deambulan perdidos y yendo hacía no se sabe dónde. Actualmente
necesitan líderes que les cautiven para que con ellos sean capaces de
rectificar el rumbo y orientar sus vidas
·
“Felices los que saben ponerse en el lugar del otro, en los que tienen la
capacidad de abrazar, de perdonar. ¡Qué lindo que es! Es como recobrar la vida,
es tener una nueva oportunidad”.
Abrazar a los demás, perdonarlos, convivir, ayudarles,
tener detalles es indiscutiblemente una forma de mejorar nuestras capacidades y
vivencias; y de recobrar, si estaba alicaída, nuestra, cristiana y muy especial,
forma de vida.
·
“Y es bueno que ustedes los jóvenes vean que felicidad y placer no son
sinónimos. Una cosa es la felicidad y el gozo… y otra cosa es un placer
pasajero. La felicidad construye, es sólida, edifica.”
La felicidad con Dios exige compromiso, sacrificio y
entrega pero es muy valiosa para andar por la vida.
En muchas ocasiones los jóvenes, y los mayores
incluso, no entienden que la felicidad y el placer no siempre coinciden; si no
que por el contrario son cosas, a veces, muy distintas e incluso contrapuestas.
Para entender esto es muy importante la buena formación cristiana que haga de
los jóvenes personas: con criterio, con
raciocinio, con madurez...
·
Necesitamos hoy:
o
“Jóvenes con esperanza y jóvenes con fortaleza”.
·
“No queremos jóvenes debiluchos, jóvenes que están “ahí no más”: ni sí, ni
no”.
·
“No queremos jóvenes que se cansen rápido y que vivan cansados, con cara de
aburridos”.
·
“Queremos jóvenes fuertes con esperanza y con fortaleza:
o
Y ¿Por qué?: Porque conocen a Jesús”
Hoy es frecuente encontrar jóvenes abatidos,
desilusionados, desalentados, sin expectativas y sin valores significativos; y
esto origina: decadencia moral, debilidad, tristeza, apatía y desconcierto. Por
lo tanto necesitamos hoy, como dice el Papa, fortalecer nuestra esperanza, ser
fuertes en la fe, y vivir de forma impetuosa el amor. Un amor que cautive, que
“enganche” y llegue a cada rincón del mundo.
·
“La amistad es de los regalos más grandes que una persona, que un joven
puede tener y puede ofrecer. ¡Es verdad! Qué difícil es vivir sin amigos”.
Fíjense si será de las cosas más hermosas que Jesús
dice:
·
“Yo los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí de mi
Padre” (Jn 15,5).
En esto radica uno
de los secretos más grande del cristiano.
La amistad, en realidad, es esencial para la vida de
los jóvenes, por eso es muy triste encontrar a jóvenes sin amigos o que no son
amigos de nadie. Podríamos decir que esto es como la antítesis de la juventud.
Una juventud sin amistad, sin el necesario consuelo de alguien como ellos que les entienda y les
haga la vida más placentera, más llevadera y feliz es una juventud decadente,
moralmente arruinada. Por lo tanto
tendremos que embarcarnos en el cometido de fomentar entre los jóvenes
la convivencia y el trato y procurar lugares y actividades para que no se
aíslen con sus videojuegos, con internet, con la televisión …
·
“Busquen charlar, aprovechen a escuchar la vida, las historias, los cuentos
de sus mayores y de sus abuelos, que hay sabiduría allí. Pierdan mucho tiempo
en escuchar, que escuchando a los mayores nunca se pierde el tiempo”.
El Papa abre a los jóvenes una nueva puerta, la puerta
de la escucha. La puerta enriquecedora del diálogo: con los educadores, con
nuestros mayores, con los ancianos, con nuestros padres. Es una gran puerta que
da una perspectiva nueva a nuestra vida, a su vida, y nos hace y los hace: más
reflexivos, más informados, más cultos y con una mayor riqueza humana y
espiritual.
·
“Hagan lío y organícenlo bien. Un lío que nos dé un corazón libre, un lío que
nos dé solidaridad, un lío que nos dé esperanza, un lío que nazca de haber
conocido a Jesús y de saber que Dios, a quien conocí, es mi fortaleza”.
De esta forma tan atrayente y tan
especial para los jóvenes, el papa Francisco, les habla: de proyectos, de
iniciativas, de actividades y de organizar todo con el fin: de promover la
esperanza, de promover la fe, de promover el conocimiento de la verdadera,
auténtica e inigualable figura de Jesucristo. Por favor entre todos, siguiendo
el ejemplo de Francisco, podemos hacer: “Un gran lio”, un lío entusiasta que
nos lleve a Dios y que nos lleve al Cielo: La tan gran y anhelada Meta.
·
“Jesús, te pido por los chicos y chicas que no saben que Vos sois su
fortaleza y que tienen miedo de vivir, tienen miedo de soñar. Jesús, enséñanos
a soñar, a soñar cosas grandes, cosas lindas, cosas que, aunque parezcan
cotidianas, son cosas que engrandecen el corazón”.
Jesús nuestro amigo, siguiendo las
palabras de Francisco, nos ofrece su jugada. Jesús no nos vende humo, nos vende
realidades concretas; realidades que a veces son difíciles de realizar.
Y entonces el Papa les pregunta a
los jóvenes:
·
“¿Cómo vas a amasar esos ideales, día a día, en lo concreto? Aunque a veces
te equivoques y tengas que corregirte y volver a andar”.
Y
yo, el que esto escribe, para terminar, como profesor y padre, os digo a todos
los jóvenes y también a esos jóvenes con los que, durante tantos años, he
convivido, con los que he participado de sus aventuras y de sus travesuras, y
con los que he sido feliz. A todos os digo:
·
Soñar, amasar ideales,
realizar proyectos, hacer lío, emprender aventuras, acariciar con ternura,
hablar con cariño, estar vibrante con el corazón y con el alma, y siempre
adelante: sin temor, sin miedos inútiles, sin cobardía ¡Adelante¡
·
Y esto para llegar a la meta,
aunque lleguemos rotos, pero lo haremos con ilusión; sabiendo que Dios nos
espera con los brazos abiertos y que cuando nos vea correrá a nuestro encuentro
y alcanzaremos el éxtasis de: la plena, absoluta y única felicidad.
Publicada en “Cartas al Director,
Tu voz en la red” Digital 15 febrero de
2016
Publicada en DIARIO DE ÁVILA Digital 17 febrero 2016