194 Provocadores sociales.

194   Provocadores sociales.

Hay personas en los distintos estamentos sociales que habitualmente como costumbre y como forma de actuar:
Ø Se quejan de todos y de todo.
Ø Crean continuamente malestar.
Ø Originan grescas y disputas.
Ø Llevan siempre la contraria a los demás.
Ø Dan lugar a desacuerdos y rupturas innecesarias.
Ø No ceden en sus decisiones aunque perjudiquen a otros.
Ø Están siempre exigiendo.
Ø Se consideran el centro y los más importantes.
Ø No sintonizan con nadie.
Ø Son chabacanos en el trabajo y sin embargo critican el trabajo de los demás.
Ø Se apropian de lo mejor.
Ø Eligen siempre el mejor sitio sin pensar en los demás.
Ø Los demás no cuentan para ellos.
Ø De una forma enfermiza lo critican todo y a todos.
Ø No agradecen nunca nada.
Ø A los demás siempre los consideran inferiores.
Utilizan habitualmente en sus conversaciones y en su comportamiento:
o   Palabras hirientes.
o   Gestos duros.
o   Miradas provocativas.
o   Palabras insultantes.
o   Protestas continuas.
También les gusta:
§  Llamar la atención.
§  Crear confusión.
§  No ser puntuales en las citas.
§  Las discusiones.
§  Reírse de los demás.
§  Aprovecharse de la gente.
§  Ser desagradables en el trato.
§  Mostrar antipatía.
Habitualmente:
ü No comparten el cariño.
ü Provocan situaciones violentas.
ü Provocan situaciones de enfado.
ü Provocan situaciones de discordia.
ü Son por lo general molestos.
ü No son condescendientes.
Y esto: en el trabajo, en el hogar, en las reuniones, en las fiestas y en cualquiera de los lugares en los que ellos están presentes.
A todos los demás los consideran inútiles a su lado.
Son hábiles para crear: malestar, desasosiego, inquietud, miedo, tensión, desencanto.
Transmiten una preocupante y desilusionante energía negativa.
Las riñas son también habituales cuando se convive con ellos.
Todo lo que los demás hacen está mal, revalorizan sólo lo que hacen ellos.
Son casi siempre personas complicadas, poco serviciales y poco solidarias, fuente de inestabilidad: social, profesional y familiar.
Junto a las personas provocadoras no se pueden crear proyectos, pues como norma dan al traste con todo.
Son personas psicológicamente enfermas y creadores de incertidumbre y de tristeza.
Son tiranos de la desunión y de la controversia.
A veces esclavizan a los demás.
Pueden crear fácilmente odio en su entorno.
Siempre acaban fracasando en sus proyectos aunque son perseverantes en sus objetivos.
La sociedad en sus manos está muerta, no crece ni se desarrolla debidamente.
Los provocadores engendran normalmente maldad y malos hábitos de conducta.
Con frecuencia traicionan a los demás.
En un colegio un alumno provocador arruina la labor docente.
En un hogar el que provoca aniquila la tranquilidad y rompe la armonía.
Y así en todo.
Es una desgracia si en algún lugar nos encontramos con estas personas pues lo contaminan todo, y además es muy difícil que estas personas cambien pues son trastornos y comportamientos muy afianzados en la personalidad y difícil de erradicar.
Por lo tanto los que tengan la desdicha de encontrarse con este tipo de personas han de tomar las medidas oportunas, pues su cercanía les puede producir: nerviosismo, inquietud, ansiedad, depresión, inseguridad, desasosiego y puede bajar su autoestima, con lo cual queden mermadas sus capacidades.
Por la cercanía de estas personas:
Se puede perder un puesto de trabajo, se pueden perder amistades, nos pueden aislar socialmente, nos pueden hacer perder nuestros estudios; y en muchas ocasiones estas personas provocadoras acaban convirtiéndose en acosadores dispuestos a aniquilarnos si no consiguen sus objetivos.
Por lo tanto cuidado con las personas complicadas y provocadoras pues lo que puede empezar con bromas graciosas puede acabar en tragedias de cualquier tipo.

Publicada en “Cartas al Director, Tu voz en la red” Digital  3 enero de 2015 

Publicada en DIARIO DE AVILA Digital   3 enero de 2015