7. – Jubilación: Francisco Cabeza
Díaz
16 de diciembre de 2006
Estimado compañero, con
nostalgia celebramos en este 16 de diciembre de 2006 este acto. Durante muchos
años hemos compartido vivencias, recuerdos, anécdotas, experiencias, dolores,
tristezas, sinsabores y alegrías, ante todo muchas alegrías. Y aquí estamos
disfrutando de este excelente momento. Queremos que la juventud de la vida de
la que hoy, gracias a Dios, gozamos nos acompañe durante muchos años y podamos
seguir compartiendo nuestras vidas.
Como compañero podemos decir
de ti que has sido un gran compañero, una persona que virtuosamente has
realizado tu trabajo, con constancia, haciendo de él una gran obra.
Que difíciles son las
despedidas pues no sabe uno si colocarse al lado de la pena o al lado de la
alegría. Las despedidas tiene un sabor agridulce que bien condimentadas nos han
de llevar a vivir con optimismo el placer de cada día.
En el recuerdo, en el tuyo y
en el nuestro, quedan horas y horas de facturas, papeles, gestiones, etc. y como no
horas y horas de clases impartidas con cariño y con ilusión, sabiendo
hacer de tu labor docente un arte y una filigrana.
Querido Paco queremos seguir
contando contigo y que nuestras vidas se siguen entrelazando. Sigamos caminando
juntos. Sigamos caminando con la mirada puesta en el mismo horizonte. En el horizonte
claro que un mundo que, Dios quiera, cada día sea mejor y lleno de paz y
esperanza.
Para ti Paco, ahora y
siempre, de parte de todos, un abrazo lleno de cariño y afecto.
