398 Sí, pero con una sonrisa.

398   Sí, pero con una sonrisa.

Hay gestos muy comunes que tienen un poder increíble. Uno de estos gestos es la sonrisa.
De ello vamos a tratar, basándonos en un precioso anuncio realizado por “Danone” y basándonos también en la descripción que del mismo hace en su bloc Alfonso Méndiz, un profesor universitario y cineasta y una persona con extraordinarios valores humanos y espirituales.
De todo tiene que haber en este mundo nuestro, pero yo admiro especialmente a las personas tan singulares como Alfonso, que hacen de su trabajo un canto: al amor, a la vida, a la honestidad, a la ternura y a tantas otras cosas buenas.
Nos llena de emotividad, piensa el que esto escribe, el saber que sonreímos antes de nacer, cuando cumplimos xxx semanas en el vientre materno. Otro dato significativo es que las sonrisas alimentan nuestras emociones, lo cual es de gran interés para que entendamos el positivo valor de una sonrisa.
No es igual estar tristes que alegres.
No es igual, para nosotros y para los demás, que manifestemos un rostro: sereno, apacible y equilibrado, que transmita: paz, serenidad y sosiego; que tener un rostro desajustado, inquietante, con rasgos: de alejamiento, de frialdad, de desasosiego. Da pena ver a la gente con rostros serios o peor aún con rostros descabellados o rostros llenos de crueldad o de maldad. Personalmente siento tristeza cuando veo esos rostros que permanecen siempre inactivos o rostros con una inestable sintonía con la tristeza o el abatimiento; o rostros fúnebres o rostros que muestran desilusión, decaimiento o pena.
La vibración de una vida emotiva y entusiasta se muestra con una sonrisa, con un rostro apacible y lleno de agradecimiento a Dios, a la vida y a los demás.
En este “sabroso” anunció de Danone, nos dice también que en grupo las personas sonríen 30 veces más, y que los niños sonríen 400 veces al día.
Yo cuando veo gente que le cuesta sonreír, pienso que algo les debe pasar, pues no es normal la ausencia permanente de la sonrisa. Puede haber en estos casos tristeza crónica o depresión o una enfermedad o multiplicidad de experiencias negativas.
También existen las sonrisas peligrosas y crueles. Por ejemplo las sonrisas socarronas que normalmente tienen mala pinta. Entre estas están las sonrisas irónicas o las traicioneras o las acosadoras.
Pido a Dios que nos libre de esas sonrisas, que son las “sonrisas del diablo”. Qué triste es la sonrisa del malvado, cuando hace de ella un instrumento de su innata perversión.
Pero no quiero quedarme en lo negativo de este gesto, quiero quedarme con la sonrisa: cordial, limpia, natural y llena de vida.
Para todos los que esto leéis os deseo la felicidad y la dicha que se esconde siempre en una sana sonrisa llena de amor y de ternura.
Que Dios obtenga de nuestras sonrisas un inmenso caudal de bienes humanos y espirituales.
Dios y los demás siempre nos esperan en los detalles de cada día, en los gestos de cada día, en las sonrisas de cada día, en el amor de cada día.
Dios y los demás nos esperan siempre… Y nosotros por nuestro egoísmo no podemos defraudarle. Y como lema éste de empezar con una sonrisa no está nada mal para comenzar cada día.
Y para despedirte de la vida, el día que Dios quiera, otra sonrisa; ella quedará, grabada a fuego, para siempre en la retina de los tuyos.
Y cuando en el cielo Dios te reciba, lo hará con esa divina y grata sonrisa que te acompañará gozosamente para toda la eternidad.

Publicada en DIARIO DE AVILA Digital                                                 26  febrero de 2015  

Publicada en “Cartas al Director, Tu voz en la red” Digital 26  febrero de 2015 

Publicado en Forumlibertas.com   27   febrero de 2015 

Publicada en Diario JAÉN  26   febrero de 2015 

Publicado en La Nueva EspañaPrensa Asturiana. Digital.     1 marzo de 2015 

Publicado en Diario de León. Digital   4 marzo de 2015