Reunión familiar.
31 de octubre de 2004
Familia Amaro 2004
De nuevo, un año más, nos reunimos y
lo hacemos en este lugar acogedor de Sierra Morena que tantos recuerdos
agradables tiene para cada uno de nosotros, aquí hemos pasado todos momentos
inolvidables y desde aquí, cada día, la Virgen de la Cabeza, desde ese paraíso
terrenal que es su excelso Santuario, nos protege y nos alienta. El que nos
reunamos para rezar es importante, el que nos reunamos para convivir también lo
es. La familia es un gran tesoro y la unidad de la familia tiene un valor
inapreciable. Aquí al reunirnos fortalecemos nuestros lazos, robustecemos
nuestro cariño. Para todos estas ocasiones son propicias para el recuerdo. Nuestras
madres en el cielo o en la tierra están hoy
con nosotros: Pastora, Micaela y Asunción están hoy aquí, teniendo en
cuenta el amplio panorama de este teatro
que es el mundo. Recuerdo con gran cariño a nuestra tía Pastora, siempre
dispuesta a servir, siempre dispuesta a estar junto a los suyos entregándose
totalmente. Allí no había engaño, en ella no había falsedad, en ella todo era
claro como el agua que emana de un manantial de aguas cristalinas. Sus hijos,
su esposo y ahora sus nietos, serán siempre para ella su gran tesoro. ¿Y qué
hablar de mi madre? : Ella era el reluciente
tesoro de un hogar feliz, ella era una pieza mágica en un puzzle maravilloso.
Ella era la esposa, la madre. Murió con el Rosario en la mano y así con ese
rosario de flores se fue al cielo y allí está ahora viendo cómo cada uno
movemos los hilos en este mundo nuestro. Allí está disfrutando con nosotros.
Allí está...
Pero todo esto no es un llamamiento
a la tristeza ni a la melancolía, es la historia de un pasado que estaba lleno
de esperanza y fruto de esta esperanza estamos hoy aquí rebosantes de ilusión,
dispuestos a trabajar para hacer de este mundo un mundo mejor.
y por último quiero mencionar a
nuestra tía Chon, ella forma parte de
esta trilogía de madres encantadoras, y ella, como madre y como tía sigue empeñada:
en unirnos, en desvivirse por nosotros. Para ti con todo cariño un beso. Podría
seguir mencionando el papel fundamental que nuestros padres han jugado en esta
historia fantástica, ellos en ocasiones han tenido que ser padre y madre. Ahí
está su ejemplo, ahí están sus años, sus canas... pero ahí están ellos
dispuestos a seguir agradando, dispuestos a unir, dispuestos a querer con todo el cariño del mundo. Para vosotros y
para todos pido un aplauso.
Rafael