9 La España de los mediocres



9  La España de los mediocres 

He leído un artículo de Antonio Fraguas de Pablos más conocido como Forges y me ha llamado la atención por la forma clara, esquemática y atractiva con la que presenta uno de los temas más preocupantes de la historia actual de España. El título del artículo es “El triunfo de los mediocres”
Como punto de partida Forges admite que nos hemos convertido en un país mediocre, perdón no sólo admite sino que además lo confirma  dando pautas del porqué de esta situación. Y dice:   <<<Esto es el resultado de una cadena que comienza en la escuela y termina en la clase dirigente.
Hemos creado una cultura en la que los mediocres son:
·    Los alumnos más populares en el colegio,
·    los primeros en ser ascendidos en la oficina,
·    los que más se hacen escuchar en los medios de comunicación
·    y a los únicos que votamos en las elecciones, sin importar lo que hagan. Tan solo porque son de los nuestros>>>
Gracias Forges por presentar en un flash, rápido y concreto, la escena y el escenario de nuestra historia en los últimos años. Es peligroso, como está sucediendo, que nos acostumbremos a la mediocridad y no sólo eso sino que además veamos en ella el modo más efectivo para conseguir nuestros objetivos. Hay por ejemplo un indicador claro: no hay ninguna universidad española entre las cien mejores del mundo, es lamentable: ¡si no es esto mediocridad que es! Y nuestros talentos donde están: ¡o es que no hay!  y los millones de euros que dedicamos a estos fines dónde están: se desperdician, se despilfarran, se tiran inútilmente, como  hay tantas cosas que se tiran en nuestra España actual.
Y volviendo a lo anterior, vemos en los colegios como los alumnos eligen, a veces, para que los representen: al caradura, al de peores notas, al contestón y puede ser que hasta al acosador o al violento… y así nos va, todos desconcertados, desorientados, sin ideas, ni principios, ni objetivos. Y, más aun, entre los jóvenes y entre los políticos y entre los sindicalistas y entre los líderes, es frecuente que el mediocre sin esfuerzo consiga sus fines, pasa rápidamente de ser nada a convertirse en el gran personaje y con facilidad triunfa y los demás quedan subyugados, esclavizados, sometidos: <<incierto vaivén del personaje de trapo que maneja la escena sin tener ni “puñetera idea” de lo que va el asunto>> pero sin esa mínima idea: triunfa. Qué pena que en la España actual no haya valores suficientes, ni personajes con autoridad y liderazgo suficiente, como para destronar a los mediocres que son los que ocupan el poder y manejan: nuestra economía, nuestra cultura, nuestras ideas, nuestras creencias, nuestra educación, nuestra salud y nuestras vidas. Esperemos que pronto el trono majestuoso que los mediocres se han construido sea destruido por la eficaz labor de los hombres y mujeres: de talento, de valía y de prestigio.

Publicada en “Cartas al Director, Tu voz en la red” Digital 1 de diciembre de 2013