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SÁBADO, 27 DE ABRIL DE 2013 11:17 OPINIÓN - CARTAS DE LOS LECTORES


Desde Linares. Lo sucedido el 11 de abril en Gijón es un hecho lamentable. Una joven se suicida presuntamente por haber recibido durante bastante tiempo acoso escolar por parte de sus compañeros. Estos sucesos son más frecuentes de lo que puede parecer; yo soy profesor de Secundaria de un instituto de Linares: el IES Reyes de España y durante más de 30 años he estado dedicado a la actividad extraescolares y en  ellas habitualmente y más aún en los últimos años tratábamos temas de convivencia, temas de acoso escolar, temas de respeto y tolerancia, temas de violencia escolar y también puesto que había alumnos de mayor edad tratábamos el tema de la violencia de género.
El día de la mujer, el día de la violencia de género, el día de la paz, el día de la interculturalidad excetera eran días propicios para tratar estos temas. Cada vez son más alarmantes estas situaciones y los equipos de orientación dirigidos por psicólogos nos hacen descubrir la importancia acuciante de esta temática tan problemática y a la vez de tanta actualidad. Cada año se suceden estos acontecimientos desgraciados con más frecuencia y es lamentable que así suceda, pero así están las cosas y esto tiene carácter universal, hay sucedidos en todos los lugares del mundo. Estos hechos denotan, como hemos comentado ya en muchas ocasione, la falta de valores en la sociedad actual; yo me pregunto avanzamos o retrocedemos; qué pena que los sólidos fundamentos que debían de ser los pilares sobre los que se construyera nuestra educación no estén adecuadamente anclados en unos valores educativos consistentes. Hoy todo se relativiza, para algunos: el ser educados, el ser respetuoso, el ser amables, el pensar y atender a los demás, son cosas insustanciales, no forman parte de sus vidas. Cada día más los sinvergüenzas, los caraduras, los impresentables, los violentos son más y están más protegidos y de esta manera nuestra sociedad no ahonda en la realidad de sus problemas; en educación para los jóvenes el ministerio gasta millones de euros pero la vida sigue igual, quizás falte lo auténticamente importante los líderes ideológicos, los líderes religiosos, los líderes como: Jesucristo, María de Nazaret, el Buen Samaritano, Gandhi, Martín Luther King, Teresa de Calcuta, Juan Pablo II, Vicente de Paul, Francisco de Asís, Juan Bosco, Domingo Savio, Agustín de Hipona, Josemaría Escrivá y tantos otros que durante cientos de años han sido soporte de muchas civilizaciones. Hoy más que nunca necesitamos  abanderados del respeto y de la tolerancia, defensores de la racionalidad, defensores de las buenas costumbres, defensores de aquellos que piensan que puede existir un mundo mejor.
Rafael Gutiérrez Amaro